27 de enero de 2019

La cola y los estados de ánimo de un gato

Cuando adoptamos a Sagutxo, ninguno de los dos habíamos tenido gatos y por eso todo lo que hacía nos parecía inquietante, divertido y sorprendente. Después de estos años juntos, tanto ellos como nosotros nos entendemos a la perfección.

Esta familia se entiende con solo una mirada, ellos saben cuando hacen algo malo y cómo hacer que se nos olvide con cuatro monerías. Por ejemplo, cuando están en la terraza y queremos que entren, con sólo dos palmadas, se levantan de su siesta y se meten en casa. Hirua con un ñac ñam y Sagu a lo mejor bufa si estaba a gustito.

Para aquellos que sean principiantes, que se fijen en su cola, pues un gato nos dirá si está contento, asustado o histérico.

2 comentarios:

  1. Es todo un mundo lo de entender qué quieren decir los gatos con el lenguaje corporal. Pero lo peor no es eso sino que, una vez que tienes eso medio dominado, se convierte en todo un tema el entender por qué leches están de repente nerviosos, por ejemplo... Ayyyy. Qué complicaditos son (pero adorables igualmente). Besotes y me alegra volver a leeros!!

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  2. Hola, os hago una breve visita para saludaros.¡ Un abrazo!

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